Poco a poco se acaba mi tiempo en Londres y esta era una de las entradas del blog que tenia pendientes de publicar hace tiempo ya....
Si Londres tiene algo de especial es que es un inmenso caldero donde se mezclan las más diversas formas de vida, cultura, religiones, etc etc. La verdad es que aquí en España, por mucho que digan, vivimos un poco encerrados en nuestros propios “grupitos” de amigos y creo que no “exploramos” muchos sitios nuevos. En fin, lo de explorar viene a que, como ya os conté en otra entrada, vivo muy cerca del famoso barrio de Carden y anda que no hay pubs, discotecas y salas de música underground por explorar ahí… uno de los edificios que mas me llamo la atención era una especie de teatro con una cúpula enorme con un letrero en el que se leía “KOKOs”.
No tenía ni idea de que demonios era eso hasta que un viernes pase por ahí por la noche. Resulto que era una discoteca. Mirando por Internet me informe un poco del tipo de música, los precios, etc etc y junto con una amiga de clase fuimos a la semana siguiente. Impresionante seria la palabra con la que definir a la discoteca. Kokos era algo que yo no había visto antes, es literalmente un antiguo teatro reconvertido en discoteca. El patio de butacas es la pista de baile, el escenario se usa para que bandas grungie, rock alternativo y cosas así toquen en directo y los palcos sirven como mini salas VIP.
Otra de las cosas que mas me impacto fue la gente: había todo tipo de personas, desde pijitas niñas rubias de 16 años (no se como habrían entrado) hasta los típicos heavys gordotes con los pelos a su manera pasando por emos, góticos, neoskins y por supuesto londinenses “normales” (o sea, del montón). Sin embargo, no estaban en grupos, al contrario, todos estaban con todos, una mezcla muy interesante de gente amigable y muy simpática ya que mi amiga y yo estuvimos hablando con muchos de ellos. Pasamos una noche estupenda de risas, gente “rara” y música diferente.
Os dejo unas cuantas fotos ;)
-Andrés